lunes, 31 de diciembre de 2007

viernes, 28 de diciembre de 2007

miércoles, 26 de diciembre de 2007

lunes, 24 de diciembre de 2007

domingo, 23 de diciembre de 2007

CUARTA SEMANA DE ADVIENTO


Oración para la Cuarta Semana


Todos hacen la señal de la cruz.
"Nuestro auxilio es en el nombre del Señor"

Todos: "Que hizo el cielo y la tierra"


Lectura bíblica:Primera lectura: Rm 13,13-14 "Conduzcámonos como en pleno día, con dignidad. Nada de comilonas y borracheras, nada de lujuria ni desenfreno, nada de riñas ni pendencias. Vestios del Señor Jesucristo". "Palabra de Dios"


Todos: "Te alabamos Señor".


Segunda lectura: 2 Tes. 1,6-7 "Es justo a los ojos de Dios pagar con alivio a vosotros, los afligidos, y a nosotros, cuando el Señor Jesús se revele, viniendo del cielo acompañado de sus poderosos ángeles, entre las aclamaciones de sus pueblo santo y la admiración de todos los creyentes." -"Palabra de Dios"


Todos: "Te alabamos Señor".


"Ven, Señor, y no tardes.Todos: "Perdona los pecados de tu pueblo".
Se encienden las cuatro velas

"Bendigamos al Señor"

Todos hacen la señal de la cruz mientras dicen: "Demos gracias a Dios".


Humildad y gloria El Nacimiento de Jesús


Lectura del Evangelio según San Lucas (2:6-7)"Y sucedió que, mientras ellos estaban allí, se le cumplieronlos días del alumbramiento, y dio a luz a su hijo primogénito,le envolvió en pañales y le acostó en un pesebre, porque no tenían sitio en el alojamiento."

"Palabra de Dios"

Todos: "Te alabamos Señor".


Meditación: La Virgen y San José, con su fe, esperanza y caridad salen victoriosos en la prueba. No hay rechazo, ni frío, ni oscuridad ni incomodidad que les pueda separar del amor de Cristo que nace. Ellos son los benditos de Dios que le reciben. Dios no encuentra lugar mejor que aquel pesebre, porque allí estaba el amor inmaculado que lo recibe.


Nos unimos a La Virgen y San José con un sincero deseo de renunciar a todo lo que impide que Jesús nazca en nuestro corazón.Tiempo de silencio / Tiempo de intercesiónPadre Nuestro / Ave María.
Oración Final

Derrama Señor, tu gracia sobre nosotros, que, por el anuncio del ángel, hemos conocido la encarnación de tu Hijo, para que lleguemos por su pasión y su cruz a la gloria de la resurrección. Por nuestro Señor Jesucristo.

Todos: "Amén"

sábado, 22 de diciembre de 2007

jueves, 20 de diciembre de 2007

martes, 18 de diciembre de 2007

lunes, 17 de diciembre de 2007

REFLEXIÓN


Sembrar
Obra Pontificia para las Vocaciones Eclesiásticas.


«Salió un sembrador a sembrar, y de la simiente, parte cayó junto al camino, y viniendo las aves se la comieron. Otra cayó en terreno pedregoso, donde no había mucha tierra; brotó en seguida porque la tierra era poco profunda; pero cuando salió el sol se agostó, y se secó porque no tenía raíz. Parte cayó entre cardos, pero éstos crecieron y la ahogaron. Finalmente otra parte cayó en tierra buena y dio fruto, una ciento, otra sesenta, otra treinta» (Mt 13, 3-8).

Este párrafo precisa, en cierta manera, el primer paso de un camino pedagógico, la primera actitud por parte de quien se pone como mediador entre Dios que llama y el hombre que es llamado, y que se inspira, ciertamente, en el hacer de Dios. Es Dios-Padre el sembrador: Iglesia y mundo son los campos donde continúa esparciendo abundantemente su semilla, con absoluta libertad y sin exclusiones de ningún tipo; una libertad que respeta la del terreno donde cae la semilla.


a) Dos libertades en diálogo

La parábola del sembrador manifiesta que la vocación cristiana es un diálogo entre Dios y la persona humana. El interlocutor principal es Dios, que llama a quien quiere, cuando quiere y como quiere « según su propósito y su gracia » (2 Tim 1,9); que llama a todos a la salvación, sin dejarse limitar por las disposiciones del receptor. Pero la libertad de Dios se encuentra con la libertad del hombre, en un diálogo misterioso y fascinante, hecho de palabras y silencios, de mensajes y acciones, de miradas y gestos; una libertad perfecta, la de Dios, y otra imperfecta, la del hombre. La vocación es, por tanto, totalmente acción de Dios, pero también real actividad del hombre: trabajo y penetración de Dios en lo profundo de la libertad humana, pero también fatiga y lucha del hombre libre de acoger el don.

Quien va junto a un hermano en el camino del discernimiento vocacional penetra en el misterio de la libertad, y sabe que podrá ser de ayuda sólo si respeta tal misterio. Incluso cuando ello debiera suponer, al menos en apariencia, un menor resultado. Como ocurre con el sembrador de la parábola.


b) El valor de sembrar por doquier

Precisamente el respeto de ambas libertades significa, ante todo, valor para sembrar la buena semilla del Evangelio, de la Pascua del Señor, de la fe y, en fin, del seguimiento. Esta es la condición previa; no se hace ninguna pastoral vocacional, si no se tiene este valor. No sólo esto; sino que es necesario sembrar por doquier, en el corazón de cualquiera, sin ninguna preferencia o excepción. Si todo ser humano es criatura de Dios, también es portador de un don, de una vocación particular que espera ser reconocida.

Con frecuencia, se deplora en la Iglesia la escasez de respuestas vocacionales; y no se repara en que, con igual frecuencia, la propuesta es hecha dentro de un limitado círculo de personas, y, tal vez, retirada inmediatamente tras el primer rechazo. Viene bien recordar aquí, el reclamo de Pablo VI: «Que ninguno, por nuestra culpa, ignore lo que debe saber, para orientar, en sentido diverso y mejor, la propia vida».(97) Y, sin embargo, ¡cuántos jóvenes nunca han oído una propuesta cristiana acerca de su vida y de su futuro!

Es maravilloso observar al sembrador de la parábola en el gesto amplio de la mano que siembra «por doquier»; es conmovedor reconocer en tal imagen el corazón de Dios-Padre. Es la imagen de Dios que siembra en el corazón de todo viviente un proyecto de salvación; o si queremos, es la imagen del «derroche» de la generosidad divina, que se desparrama sobre todos porque quiere salvar a todos y llamarlos a Sí.

Es la misma imagen del Padre que se hace visible en el obrar de Jesús, el cual llama a Sí a los pecadores, escoge para construir su Iglesia gente aparentemente inadecuada para esta misión, no conoce límites ni hace acepción de personas.

Es mirándose en esta imagen como el agente de pastoral, a su vez, anuncia, propone, sacude con idéntica generosidad; y es precisamente la seguridad de la semilla depositada por el Padre en el corazón de toda criatura la que le da fuerza para ir a todas partes y sembrar de cualquier modo la buena semilla vocacional, para no quedarse encerrado dentro de los espacios habituales y afrontar ambientes nuevos y para intentar aproximaciones insólitas y dirigirse a cada persona.


c) La siembra en el tiempo propicio

Forma parte de la sabiduría del sembrador esparcir la buena semilla de la vocación en el momento propicio. Lo que de ningún modo significa adelantar los tiempos de la opción o pretender que el adolescente tenga la misma capacidad de decisión que un joven, sino comprender y respetar el sentido vocacional de la vida humana.

Cada etapa de la existencia tiene un significado vocacional, comenzando del momento en el que el muchachoa se abre a la vida y tiene necesidad de comprender su sentido, e intenta preguntarse sobre cuál es su papel en ella. No dar respuesta a tal pregunta en el momento adecuado, podría perjudicar el germinar de la semilla: «la experiencia pastoral demuestra que la primera señal de la vocación aparece, en la mayor parte de los casos, en la infancia y en la adolescencia. Por esto parece importante recuperar o proponer fórmulas que puedan suscitar, sostener y acompañar esta primera manifestación vocacional».(98) Sin limitarse exclusivamente a ellas. Cada persona tiene sus ritmos y sus tiempos de maduración. Lo importante es que junto a sí tenga un buen sembrador.


d) La más pequeña de todas las semillas

No es ciertamente labor fácil, hoy, «la del sembrador vocacional». Por los motivos que sabemos: no existe, propiamente hablando, una cultura vocacional; el modelo antropológico prevalente parece ser el del «hombre sin vocación»; el contexto social es éticamente neutro y carente de esperanza y de modelos prospectivos. Todos los elementos parecenconcurrir para debilitar la propuesta vocacional y, quizá, nos permiten aplicarle cuanto Jesús dice a propósito del Reino de Dios (cfr. Mt 13,31 ss.): la semilla de la vocación es como un granito de mostaza que cuando se lo siembra, o cuando viene propuesta o indicada como presente, es la más pequeña de todas las semillas; muy a menudo no suscita consenso inmediato alguno; al contrario, es negada y desmentida, es como sofocada por otras expectativas y proyectos, ni tomada en serio; o, más bien, se la mira con recelo y desconfianza, como si fuese una semilla de infelicidad.

Y, entonces, el joven, rechaza, dice no interesarle, ha hipotecado ya su futuro (u otros ya lo han hecho por él); o quizá dice que le agradaría y le interesa, pero que no está seguro y, además, es muy difícil y le da miedo...

Nada de extraño y absurdo en esta reacción medrosa y negativa; en el fondo lo había dicho ya el Señor. La semilla de la vocación es la más pequeña de todas las semillas, es débil y no se impone, precisamente porque es manifestación de la libertad de Dios que quiere respetar hasta el extremo la libertad del hombre.

Y, por lo tanto, también es necesaria la libertad de quien orienta el camino del hombre: una libertad de espíritu que permita continuar y no echarse atrás ante el rechazo y desinterés iniciales.

Jesús dice, en la breve parábola del grano de mostaza, que «una vez crecida, es la más grande de las hortalizas» (Mt 13,32); por tanto, es una semilla que posee su fuerza, aunque no es evidente y eclosiva de inmediato, antes bien, necesita muchos cuidados para madurar. Hay una especie de secreto elemental que forma parte de la sabiduría campesina: para asegurar cualquier cosecha en la estación justa, es preciso cuidar todo, desde el terreno hasta la simiente; prestar atención a todo, desde lo que la hace crecer hasta lo que obstaculiza su desarrollo. Incluso a las imprevisibles intemperies de las estaciones. En el campo vocacional sucede algo parecido. La siembra es sólo el primer paso, al que deben seguir otras atenciones bien precisas para que las dos libertades entren en el misterio del diálogo vocacional.

domingo, 16 de diciembre de 2007

TERCERA SEMANA DE ADVIENTO


Oración para la Tercera Semana


Todos hacen la señal de la cruz.Líder: "Nuestro auxilio es en el nombre del Señor"

Todos: "Que hizo el cielo y la tierra"
Lecturas bíblicas:Primera lectura: 1 Tesalonicenses 3,12-13 "Que el Señor os colme y os haga rebosar de amor mutuo y de amor a todos, lo mismo que nosotros os amamos. Y que así os fortalezca internamente, para que, cuando Jesús, nuestro Señor, vuelva acompañado de todos sus santos, os presentéis santos e irreprensibles ante Dios nuestro Padre”"Palabra de Dios"

Todos: "Te alabamos Señor".


Segunda lectura: Filipenses 4,4-5. "Estad siempre alegres en el Señor; os lo repito, estad alegres. Que vuestra mesura la conozca todo el mundo. El Señor está cerca." "Palabra de Dios"

Todos: "Te alabamos Señor".
Se encienden tres velas: "Bendigamos al Señor"

Todos hacen la señal de la cruz mientras dicen: "Demos gracias a Dios".


Esperanza A Belén

La Virgen vuelve a viajar, lejos de su familia y amistades, obedece el mandato del emperador... En Belén ella y San José no encuentran sino rechazo. Todo parece salir muy mal... Por menos algunos matrimonios se han divorciado. Pero ellos no pierden la esperanza.
No hay Navidad sin sufrimiento, sin la prueba y la superación de los egoísmos. La esperanza cristiana lo vence todo. No es resignación negativa. Hace todo lo posible para hacer de las situaciones difíciles lo mejor. No pierde de vista a Dios que se hace presente en el corazón humilde y fiel.


Tiempo de silencio. / Tiempo de intercesiónPadre Nuestro. / Ave María.


Oración final:

Estás viendo, Señor, cómo tu pueblo espera con fe la fiesta del nacimiento de tu Hijo; concédenos llegar a la Navidad, fiesta de gozo y salvación, y poder celebrarla con alegría desbordante. Por nuestro Señor Jesucristo.
Todos: "Amén".

REFLEXIÓN

sábado, 15 de diciembre de 2007

LAS POSADAS


Las posadas son fiestas populares que en México se celebran durante los nueve días antes de Navidad, o sea del 16 al 24 de Diciembre. Estas fiestas recuerdan el peregrinaje de María y José desde su salida de Nazaret hasta Belén donde buscan un lugar donde alojarse para esperar el nacimiento del niño Jesús.

En el México prehispánico celebraban el advenimiento de Huitzilopochtli (Dios de la Guerra) durante la época invernal o Panquetzaliztli, que iba del 17 al 26 de diciembre, que coincidía con la época donde los europeos celebraban la Navidad. Estas celebraciones fueron cambiando una vez que el pueblo fue evangelizado y la imagen de Huitzilopochtli fue sustituida por la de José y María.

Amenizadas con cánticos o

villancicos, las posadas reaniman el espíritu religioso de los participantes, están llenas de emoción, alegría y amistad que siempre se respira durante este tiempo. Las posadas tradicionales tienen ligeras variantes de acuerdo al lugar en donde se celebren y han ido cambiando con el tiempo, sin embargo los aspectos comunes más importantes son el pedir posada con los villancicos tradicionales, el rezar el rosario, el romper la piñata, y claro que nunca pueden faltar los aguinaldos, el ponche, las velas, la fruta, las luces de bengala y en algunas ocasiones la cena y los regalos.

Para empezar En varias poblaciones las posadas se celebran en las calles las cuales previamente se adornan con hilos de heno y faroles. Y en otras muchas poblaciones se sustituyen los tradicionales peregrinos de barro por elementos vivos, causando mayor emotividad entre los asistentes.

No existe templo, parroquia o capilla por pequeña que sea que durante el período del 16 de Diciembre al 6 de Enero, que no levante un nacimiento en ocasiones con verdaderas joyas escultóricas o figuras de barro realizadas en Tonalá o Tlaquepaque y celebren las posadas con cantos religiosos, guijolas, panderos, triángulos, etc., para crear mayor alegría en los asistentes
A la hora de pedir posada, la tradición nos dice que José y María tuvieron que ir de puerta en puerta pidiendo posada, este hecho podría no ser muy relevante ya que es muy probable que no hayan sido los únicos peregrinos que no encontraban lugar para pasar la noche, pero el caso de José y María es muy especial ya que María se encontraba embarazada y a punto de dar a luz.

Para representar este acontecimiento, dos voluntarios se pueden vestir como José y María, o pueden utilizar figuras de los peregrinos de las que se colocan en los nacimientos.
Los peregrinos acompañados por un grupo de invitados a la posada salen de la casa y piden posada en la puerta, entonando los villancicos. Las personas que se quedaron en el interior de la casa deben negar la posada obligando a los peregrinos a pedir posada dos o tres veces, hasta darles hospedaje con los cantos tradicionales (villancicos).

Se acostumbra rezar el Rosario pues este es en realidad el por qué de la celebración, pues por el amor a María es que celebramos que está a punto de dar a luz a Jesús simplemente no la podemos dejar fuera de esta celebración. Al rezar el Rosario, entre misterio y misterio se hace una pequeña reflexión … hay muchos libros con lecturas especiales para estas reflexiones
Esta es quizá la parte mas divertida de la posada (sobre todo cuando eres niño).

Esta actividad esta repleta se símbolos y analogías…. La piñata debe ser una piñata de 7 picos que representan los 7 pecados capitales pero además debe estar llena de dulces que representan la gracia de Dios, la venda en los ojos representa la fe, el palo representa a Dios y los que gritan representan a la iglesia católica.


El acto de romper la piñata puede interpretarse mas o menos de la siguiente forma: Cada uno de nosotros con una fe ciega (ojos vendados) en la ayuda de Dios (el palo) nos disponemos a combatir el pecado (intentar golpear la piñata), nuestros hermanos nos ayudaran y nos indicaran el camino a seguir para lograrlo mas fácilmente (los gritos de la gente) y cuando finalmente logremos vencer al pecado (romper la piñata) la gracia de Dios (los dulces) se derramaran sobre nosotros.

La posada termina con una convivencia en la que se puede dar de cenar a los invitados e inclusive puede haber bebida. Hay quien dice que la cena es para celebrar que se venció al pecado (se rompió la piñata). Los 9 días tradicionales de posadas se hacen en honor a los 9 meses de embarazo que vivió María.

Estas fiestas se realizan todos los días desde el 16 de diciembre hasta la noche del 24. En las colonias la gente se reúne en diferentes casas, al principio se forma una pequeña peregrinación donde al frente van dos o varias personas cargando pequeñas estatuas de José, María, el Ángel y a veces un burro (en muchos lugares se llega a representar en vivo con gente personificada).

Originalmente se rezaba un rosario antes de empezar o durante la posada; después se reparten velas y se prenden para cantar la letanía, se camina hasta el frente de una casa y se canta para pedir alojamiento (posada) para José y María, después las personas que ya estaban dentro de la casa cantan para negar el asilo hasta que ven que son José y María quienes lo piden; se deja entrar a toda la gente cantando "entren santos peregrinos", y aquí es donde comienza la diversión.

Luego toca el turno a romper la piñata. La piñata se hace con una olla de barro que se cubre con papel de muchos colores y se rellena de dulces y fruta, esta representa al demonio con los colores llamativos para cautive al hombre y seda a la tentación. Las piñatas originales constaban de siete picos que representaban los siete pecados capitales. Para romperla primero se cuelga, los niños esperan su turno para pegarle con un palo y finalmente romperla; pegarle a la piñata con los ojos vendados representa la fe como una virtud que nos permite creer sin tener que ver; el palo con el que se le pega representa la fuerza de la virtud para romper las tentaciones del mundo. Una vez que se rompe la piñata caen los dulces y fruta que contenía y finalmente todos se lanzan a fin de recoger una parte; el relleno de la piñata representa el amor de Dios ya que al destruir al mal se obtienen los bienes anhelados. A las personas que no pueden acercarse a recoger dulces se les reparten "aguinaldos", que son bolsitas con dulces, galletas y fruta para que nadie se quede sin los beneficios de la piñata.

Y así las fiestas continúan de casa en casa, hasta el día de Navidad.

viernes, 14 de diciembre de 2007


Una hermosa fiesta para la inmaculada concepción

Este año todos los devotos de María estamos de fiesta: Se cumplen 150 años de las apariciones de la Santísima Virgen a la pequeña Bernadette Soubirous en Lourdes, Francia, y S.S. Benedicto XVI nos regala por este motivo un Año Jubilar desde diciembre de 2007 hasta diciembre de 2008 y nos concede beneficiarnos de la Indulgencia Plenaria cada día –aplicable también a modo de sufragio por las almas de los fieles difuntos- si realmente arrepentidos, debidamente purificados mediante el sacramento de la Confesión, alimentados con la sagrada Comunión y rezando con devoción por las intenciones del Sumo Pontífice, se visitan devotamente:

1. El Baptisterio Parroquial utilizado para el bautizo de Bernardita
2. La Casa denominada "Cachot" donde vivía la familia Soubirous
3. La gruta de Massabielle, donde se apareció la Santísima Virgen
4. La Capilla del Hospicio donde Bernardita recibió la Primera Comunión
Y si en cada uno de estos cuatro lugares jubilares se dedica un tiempo a la meditación, concluyendo con el rezo del Padrenuestro, la Profesión de fe y la oración jubilar u otra invocación mariana.

A quienes resulta imposible visitar físicamente la ciudad de Lourdes, MISIÓN+MARÍA propone igualmente dedicar con devoción este año a la Santísima Virgen y hacer del ‘Camino del Jubileo’ nuestro propio itinerario espiritual…
-La humildad y la sencillez como el espacio predilecto de Dios para obrar sus milagros
-La confianza inquebrantable en María Madre como Causa de nuestra alegría y Auxilio de los cristianos ‘cuando la vemos tanto como cuando no la vemos’ en nuestro caminar por la vida
-Las promesas de las Bienaventuranzas cumplidas y manifestadas en lo más pequeño a los ojos del mundo…

Dejemos a Santa Bernardita ser nuestra guía y nuestro modelo en este sendero de santidad a través del amor y la obediencia filial.

MISIÓN+MARÍA no ha querido dejar de unirse a las celebraciones participando de una procesión y misa familiar al lado de diversas organizaciones el 8 de diciembre de 2007 en la Parroquia de Nuestra Señora de Lourdes de la Ciudad de México, y entregando en el Santuario de Francia cientos de sus rosarios de hilaza como regalo a los peregrinos enfermos mediante las Hermanas de la Caridad de Nevers durante el mes de febrero de 2008.


Visita el sitio oficial del Jubileo y sigue paso a paso los sucesos y noticias de éste año de fiesta www.lourdes2008.com/es

ORACIÓN DEL JUBILEO

Dios, Padre nuestro,
entre todas tus criaturas, hiciste surgir a María,
la criatura perfecta, la Inmaculada Concepción.
En Lourdes ella misma se dio este nombre
y Bernardita lo repitió.

La Inmaculada Concepción es un grito de esperanza:
el mal, el pecado y la muerte ya no son los vencedores.
María, signo precursor, aurora de la salvación.
María, la inocencia, refugio de los pecadores,
Te rogamos.

Dios te salve, María…

Señor Jesús,
Tú nos has dado a María como Madre.
Ella compartió tu Pasión y tu Resurrección.
En Lourdes, se mostró a Bernardita,
contristada por nuestros pecados, pero radiante de tu luz.
Por medio de Ella, te presentamos las alegrías y las penas,
las nuestras, las de los enfermos, las de todos los hombres.

María, hermana y madre nuestra,
nuestra confidente y nuestra ayuda,
Te rogamos.

Dios te salve, María…

Espíritu Santo, Espíritu de amor y de unidad.
En Lourdes, María pidió por medio de Bernardita,
que se construya una capilla y que se venga en procesión.
Inspira a la Iglesia, construida por Cristo sobre la fe de Pedro. Congrégala en la unidad y guía su peregrinación
para que sea fiel y decidida.

María, colmada del Espíritu Santo,
la esposa y la esclava.
Modelo de los cristianos y rostro materno de la Iglesia,
Te rogamos.

Dios te salve, María…


Porque eres la sonrisa de Dios,
el reflejo de la luz de Cristo,
la morada del Espíritu Santo;
porque escogiste a Bernardita en su miseria,
porque eres la estrella de la mañana, la puerta del cielo,
y la primera criatura resucitada,
Nuestra Señora de Lourdes,
te admiramos, te aclamamos y cantamos contigo las maravillas de Dios:

¡Magnificat!

miércoles, 12 de diciembre de 2007

VIRGEN DE GUADALUPE

LA VIRGEN DE GUADALUPE

Patrona de México y Emperatriz de las Américas

FIESTA: 12 de diciembre


"Confiamos a Santa María de Guadalupe, Patrona de México y de todo el continente, el destino de los pueblos americanos y de su nueva evangelización"-Juan Pablo II,
www.virgendeguadalupe.org.mx/

lunes, 10 de diciembre de 2007

domingo, 9 de diciembre de 2007

SEGUNDA SEMANA DE ADVIENTO

ORACIÓN CON LA CORONA DE ADVIENTO

Segunda Semana

Todos hacen la señal de la cruz. : "Nuestro auxilio es en el nombre del Señor"
Todos: "Que hizo el cielo y la tierra"

Lectura bíblica: 1Tesalonisenses 5,23-24 "Que el mismo Dios de la Paz os consagre totalmente, y que todo vuestro espíritu, alma y cuerpo, sea custodiado sin reproche hasta la venida del Señor Jesucristo. El que os ha llamado es fiel y cumplirá sus promesas" "Palabra de Dios"
Todos: "Te alabamos Señor".Se encienden dos velas: "Bendigamos al Señor"Todos hacen la señal de la cruz mientras dicen: "Demos gracias a Dios".

Recordamos la virtud de la CaridadLa VisitaciónMaría fue presurosa a servir a su prima Isabel ya que el ángel le avisó que de ella nacería un niño: Juan Bautista. No temió la distancia y las dificultades. Respondió con un amor que se hace servicio y que une corazones.Acción: Es tiempo de ir a servir a los que mas nos necesitan, en especial los pobres, los enfermos... los ancianos
Tiempo de silencio / Tiempo de intercesiónPadre Nuestro / Ave María.

Oración final: "Señor Todopoderoso, rico en misericordia, cuando salimos animosos al encuentro de tu Hijo, no permitas que lo impidan los afanes de este mundo; guíanos hasta él con sabiduría divina para que podamos participar plenamente de su vida. Por nuestro Señor Jesucristo.

Todos: "Amén".

sábado, 8 de diciembre de 2007

jueves, 6 de diciembre de 2007

REFLEXIÓN


¿Por qué mi hija/hijo?
Rafael González-Villalobos

Fuente:interrogantes.net

Esta cuestión presenta una doble vertiente. Dicho de otro modo, los padres podemos plantearnos esta pregunta en un doble sentido.

Un primer sentido sería el de aquellos que, asumiendo en su totalidad todo lo expuesto hasta el momento, ven en la llamada divina a su hijo una bendición inmerecida. A estos tan solo cabe decirles que den muchas gracias a Dios, y sigan rezando por sus hijos.

El segundo sentido, más habitual y absolutamente comprensible, es el de los padres que se plantean si no existirán otras y otros a los que complicar la vida: ¿por qué a mi hija, y no a la hija de mi vecino, o a la compañera de clase?

Antes de contestarte, déjame que te insista en que la vocación de un hijo es un signo de predilección del Señor, en primer lugar hacia el propio hijo, y en segundo lugar y por extensión, a su familia.

¿Quieres saber porqué Dios ha complicado la vida de tu hijo, y la tuya?

1. Porque durante los años anteriores, has trabajado muy bien esa tierra para dejarla en disposición de que el Señor siembre, la semilla agarre, y dé como resultado un buen árbol. Posiblemente casi con toda seguridad cada vez que metías el arado pensabas en cualquier cosa menos en que estabas preparando el terreno a Jesús. Pero como lo has hecho muy bien, como has obtenido un hijo de Dios alegre, generoso, sincero, trabajador, leal, incluso con vida de trato con su Padre, ha llegado el Sembrador y ha dicho: esta tierra la quiero para mí, para que crezca en ella uno de mis mejores árboles.

Piensa que, aunque para Dios todo es posible, y en cualquier momento caben las conversiones a lo San Pablo, lo más habitual será que Jesús no recurra a las caídas del caballo, sino que elija a sus amigos más cercanos entre aquellos que tienen una base sólida, en vida cristiana y en virtudes humanas, para escuchar su llamada y responder afirmativamente.

Además, no olvides que San Pablo, siendo todavía Saulo, era un gran perseguidor de la Iglesia; pero al mismo tiempo, era un gran hombre, lleno de virtudes humanas. Por eso, de un gran perseguidor salió un gran Apóstol.

2. Porque Dios tiene todo el derecho a llamar a quien quiera. No pierdas de vista que los padres recibimos a los hijos en depósito, no como propiedad. Por más que nos empeñemos, y en ocasiones nos empeñamos más de la cuenta, nuestras hijas y nuestros hijos volarán. Antes o después saldrán de casa, como lo hemos hecho nosotros, y como lo hicieron nuestros padres. Entonces, ¿cómo podemos extrañarnos de que quiera marcharse con Jesús, y no nos llama la atención que se vaya con una mujer o con un hombre?

Por último, déjame que te cuente algo que he oído en muchas ocasiones de labios de San Josemaría Escrivá: el noventa por ciento de la vocación se debe a los padres. Piénsalo despacio. Saboréalo. Llénate de orgullo. Y de responsabilidad.

miércoles, 5 de diciembre de 2007

martes, 4 de diciembre de 2007

lunes, 3 de diciembre de 2007

domingo, 2 de diciembre de 2007

sábado, 1 de diciembre de 2007

ORACIÓN POR LA PAZ DE VENEZUELA


Ambientación

En una cruz desnuda, colocar bastantes carteles con palabras que indican la situación actual de nuestro país. Ej. oficialismo... oposición... paro... chavistas... golpistas... círculos bolivarianos... impuestos... pobreza... hambre... división... Colocar la cruz sobre el Mapa de Venezuela.
Preparar flores, tantas como participantes.

Toma de conciencia(Música de fondo)

Contemplamos la cruz que representa a nuestra Venezuela crucificada... Vamos releyendo, en nuestro corazón, las palabras puestas en la cruz y nos quedamos con aquella que más impacto hace en nuestro interior, aquella que nos causa más dolor o más rabia, más sentimientos de violencia o más impotencia, más desánimo o más frustración... y la escribimos.
Reflexionamos la situación y procuramos ver todo con la mirada de Jesús, una mirada llena de amor, tolerancia, comprensión, perdón...

Animador-a -

Hablar de PAZ se ha convertido en algo que ya no nos mueve por dentro. Es mucho el tiempo que llevamos orando, pidiendo, queriendo la paz para el mundo y para nuestro país y parece que todo, en lugar de mejorar, se empeora. No nos falta la fe ni la esperanza pero hay que hacer algo más.
¿Por qué no llega la paz? ¿Qué nos hace falta? ¿Qué tengo YO que hacer? Aquí está la clave. Mientras cada un@ no se empeñe en construir la paz en su pequeño ambiente, en su pequeño recinto de vida, la paz no se extenderá, no llegará más allá. Sólo si uno se convierte en constructor-a de paz desde su ámbito familiar, de trabajo, de estudio, de relaciones interpersonales, sólo si se es capaz de comprometerse activamente a trabajar por contrarrestar la mentira, la falsedad, la injusticia..., poner amor donde existe el odio, poner luz donde hay oscuridad... sólo así se podrá colaborar a instaurar la paz. Sólo si eres mensajer@, pregoner@ de PAZ, crearás la paz.

Hace falta Palabra de Dios, hace falta llenarse el corazón de los mismos sentimientos de Jesús para poder colaborar en cambiar las estructuras de oscuridad, de pecado, de muerte..., poder poner luz en la oscuridad que reina a nuestro alrededor y que tod@s hemos contribuido a crear. HACE FALTA MUCHO AMOR para que podamos vivir la tolerancia, el perdón...

Escuchamos con devoción y atención la Palabra que Jesús tiene HOY para mí, especialmente. Me habla de amor a Dios y al prójimo porque el verdadero amor no puede separar estas realidades. El amor es preguntarse, ¿quién es mi prójimo?

Lectura - Mt. 22, 36-39

Un doctor de la ley le preguntó a Jesús para ponerlo a prueba: "Maestro, ¿cuál es el mandamiento más grande de la ley?" Jesús le respondió: "Amarás al Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente., Éste es el más grande y el primero de los mandamientos, y el segundo es semejante a éste: Amarás al prójimo como a ti mismo.
Reflexión

Relee en tu corazón estas palabras sobre el AMOR... repite lo del amor al prójimo... Piensa en tus juicios precipitados sobre los demás, en tus barreras, tus preferencias, tus discriminaciones, tus injusticias... Abre tu corazón, tal como está, a Jesús, que él vaya haciendo la obra del amor.

Elige una o más de las palabras colocadas en la cruz, aquella-s que más te cuesta aceptar. Comprueba si coincide con la que elegiste al principio... Trata de sanar tu corazón y PIDE, ORA a Jesús por ello.

(Música de fondo)

Canto - Canto de la paz (Misa de los 500 años)

La paz, la paz es fruto de la justicia,
un don de Dios que queremos aceptar. (bis)

Unidos mano con mano
queremos hacer la paz,
la paz en nuestra conciencia
con Dios y con los demás. (bis)

Que los hombres y mujeres
se traten con igualdad.
Que el fuerte no oprima al débil
y entonces vendrá la paz. (bis).

Paz con la naturaleza,
que debemos respetar
cuando en ella trabajamos
por bien de la humanidad. (bis)

Oración de San Francisco

Hazme un instrumento de tu paz,
donde haya odio lleve yo tu amor,
donde haya injuria, tu perdón,
Señor; donde haya duda, fe en ti.

Hazme un instrumento de tu paz,
que lleve tu esperanza por doquier,
donde haya oscuridad lleve tu luz,
donde haya pena, tu gozo, Señor.

MAESTRO, AYÚDAME A NUNCA BUSCAR
QUERER SE CONSOLADO COMO CONSOLAR,
SER ENTENDIDO COMO ENTENDER,
SER AMADO COMO AMAR.

Hazme un instrumento de tu paz,
es perdonando que nos das perdón,
es dando a todos que tú nos das
y muriendo es que volvemos a nacer.

Reflexión

Repite la palabra o frase más significativa para ti en estos momentos y ponle rostro, aquellos rostros de personas y/o situaciones que deben ser redimidas por el amor.

(Música de fondo)

Compromiso

Baja de la Cruz la palabra o palabras con las que has tenido que orar para crecer en el amor. Colócala-s en el suelo y pon encima una flor, símbolo de tu deseo de amar esa realidad. Haz una oración de petición por la PAZ y Dios hará el milagro del cambio. (Quien voluntariamente quiera, puede hacerlo en voz alta).

(Cada participante hace lo mismo y pone la flor sobre la-s palabra-s elegida-s. Si alguien ya las bajó, coloca simplemente la flor encima y hace la oración)

Canto - Paz en la tierra (Mientras se canta, se puede ir dando la paz a cada participante con el ánimo de hacerla extensiva a nuestr@s herman@s).

Paz en la tierra,
paz en las alturas,
que el gozo eterno reine
en nuestro corazón. (bis).

Da la paz, hermano,
da la paz,
constrúyela en tu corazón
y con tu gesto afirmarás
que quieres la paz.Que tu paz,
hermano, sea don,
es el mejor signo de amor
que tú nos puedes ofrecer, abrazo de paz.

Final -
Tomados de la mano, se reza el Padrenuestro.

miércoles, 28 de noviembre de 2007

HOMENAJE AL MISIONERO




Este es un video dedicado a todas aquellas personas que entregan su vida al anuncio de la Buena Nueva y la Extensión del Reino de Dios, desde su Ser Misionero...DIOS LES BENDIGA!!!

martes, 27 de noviembre de 2007

ORACIÓN



¡Oh Padre celestial! Dígnate concedernos la gracia insigne de ver elevada al honor de los altares a tu sierva María del Refugio, que para corresponder a los anhelos de su corazón, fundó una Congregación, destinada a difundir el amor al Santísimo Sacramento mediante la educación cristiana de la niñez y la juventud. Concédenos por su intercesión la gracia que te pedimos... (SE HACE LA PETICIÓN). Te lo rogamos por tu Hijo Nuestro Señor Jesucristo. Así sea.


Nota: Si por la gracia de Dios le fuera concedido algún favor por intercesión de María del Refugio, le agradeceremos nos lo haga saber a: CAUSA DE MARÍA DEL REFUGIO, FERNÁNDEZ LEAL 130, BARRIO DEL NIÑO JESÚS, 04330 COYOACÁN, D.F., MÉXICO.

MARÍA DEL REFUGIO AGUILAR: APOSTOL DE LA EUCARISTÍA PARA EL NUEVO MILENIO


Apóstol de la Eucaristía para el nuevo milenio.

Por: George Herbert Foulkes.

Mexico. D.F. Año: 2001


María del Refugio Aguilar de Cancino,poco antes de los ejercicios espirituales de 1886.Los Ejercicios espirituales de San Ignacio de Loyola son, sin duda, el método de perfección espiritual que más ha influido en la historia moderna del cristianismo. Basado en la reflexión sobre el sentido de la vida, desde hace más de cuatrocientos cincuenta años ha animado a millones de almas a dedicarse a las obras de mayor servicio divino y de mayor utilidad espiritual para el prójimo.


El mes de marzo de 1896, fray José Sánchez Primo, guardián de los Frailes Menores de San Miguel de Allende, en la República Mexicana, organizaba por primera vez en la población una tanda de ejercicios de encierro para señoras. Entre las que acudieron se encontraba una viuda joven: María del Refugio Aguilar de Cancino. Durante esos días la señora Cancino examinó atentamente su interior, repasando los acontecimientos de su vida hasta ese momento. Nacida en San Miguel de Allende el 21 de septiembre de 1866, la mayor de ocho hijos, aprendió en el hogar a leer y escribir y adquirió los atributos propios de las amas de casa de su tiempo. En noviembre de 1886 contrajo matrimonio con Angel Cancino, recaudador de impuestos y hombre de ideas liberales, cuya amistad con algunos políticos prominentes le auguraba una carrera exitosa como servidor público. Tuvieron un hijo, Angel. A los dos años de casados cambiaron su residencia a Toluca, en donde nació una niña, a quien pusieron los nombres de Refugio Teresa. Semanas más tarde, en febrero de 1889, falleció Cancino de una pulmonía fulminante. Con tan sólo veintidós años de edad, María del Refugio había quedado viuda y con la grave responsabilidad de dos pequeños a los que tenía que educar.María del Refugio, que en su juventud gustaba de las distracciones y de las comodidades del mundo, había puesto su confianza y sus anhelos en el futuro prometedor de su marido.


Todo se vino abajo al morir Don Angel. Regresó a la casa paterna, donde pasaba los días y los meses encerrada en su habitación. En marzo de 1891 sufrió una nueva pena: su primogénito enfermó de una angina maligna que finalmente le ocasionó la muerte. Ahora, cinco años más tarde, en los ejercicios espirituales, experimenta una profunda renovación espiritual. Saca en claro que el hombre ha sido creado para alabar y servir a Dios. Se reconcilia y agradece a Dios la vida, formando propósitos de comulgar frecuentemente, adquirir el hábito de dialogar con el Señor y examinar la conciencia todos los días, evitar los disgustos en la familia, ser recatada al mirar al sexo opuesto, no seguir las modas ni asistir a espectáculos públicos, purificar los afectos y rechazar los amores desordenados, ocuparse útilmente evitando el ocio y la lectura de novelas, pedir por el prójimo y por los difuntos, y rezar el rosario.


Es evidente que no hablamos de la conversión de un ateo sino de un creyente que había permanecido -como muchos- en un estado de inconsciencia, cumpliendo con las prácticas religiosas por mera costumbre.Desde entonces María del Refugio manifestará un amor ardiente a Jesucristo, presente real y substancialmente en el sacramento de la Eucaristía, al que quedará unida de manera singular. En su vida se ve claramente como la gracia recibida al comulgar va surtiendo efecto. Adquiere una sensibilidad exquisita que la lleva a admirar y respetar la naturaleza, y a apreciar el arte, la música y las letras, pues en todo ello experimenta algo de la belleza, de la gloria y la majestad de Dios, a través de Su creación y de las obras humanas que la reflejan. Fruto también de esa vida eucarística es una extraordinaria alegría que la caracteriza hasta el final de su vida. Por encima de las contrariedades, pruebas y enfermedades, su fe y esperanza en el amor infinito de Dios, la llenan de regocijo. Ingresa a la Orden Tercera Franciscana, donde profesa el 4 de octubre de 1896, llegando a ser ministra y maestra de novicias (épocas en las que, según la opinión de algunas personas, la Tercera Orden alcanzó mayor florecimiento). Uno de los apostolados característicos de las terciarias franciscanas de ese tiempo, eran los catecismos para preparar a la primera comunión. Como catequista, María del Refugio descubre que, para poder transmitir efectivamente a los niños las verdades de la fe y muy particularmente lo relacionado con la Eucaristía, debe hacer suyas esas enseñanzas, encontrando ahí una fuente para captar algo de la grandeza del Misterio. Si el sacramento de la Eucaristía es el sacramento de amor, que simboliza la unión de Cristo con la Iglesia, es natural que, como alma auténticamente eucarística, María del Refugio sienta el deseo, el impulso o la necesidad de amar y servir a los demás y de dedicarse a las obras de misericordia.


Su alegría se ve empañada por la ausencia de Dios en la sociedad, la corrupción, la inmoralidad, los atentados contra la vida, los niños y jóvenes sin acceso a la instrucción, los hombres esclavizados por los vicios y adicciones, los desplazados de sus lugares de origen, los que sufren persecución, guerras, violencia y la miseria en todas sus formas. De ahí que se sienta motivada a ejercitar la caridad evangélica, para liberar a los hombres y proclamarles el mensaje de salvación. Desempeña, pues, un intenso apostolado en favor de los más necesitados: socorre a familias y personas que atraviesan por difícil situación económica, llevándoles comestibles, carbón y ropa; visita semanalmente a los reclusos de la cárcel municipal y a los enfermos del hospital, viendo que los moribundos reciban los últimos auxilios espirituales; se preocupa por los que viven en mal estado, como también por los que, estando bien casados, viven desunidos; escucha y aconseja a quienes acuden a ella con sus penas y problemas. A los empleados domésticos los trata como miembros de la familia y todos los días reza el rosario con ellos.


El día de su santo invita a muchos indigentes y ella misma les da de desayunar. Su interés por los demás no se limita a determinada actividad para aliviar las carencias materiales o espirituales de los menos favorecidos. Se vuelve sociable y cultiva la amistad con personas de distintos medios y clases: sacerdotes, religiosas, políticos, profesionistas, literatos, actores, madres de familia, viudas y estudiantes, tratándolos a todos con respeto, sin exclusivismo ni egoísmo y buscando en la relación interpersonal la perfección cristiana.María del Refugio es una mujer atractiva y no le faltan pretendientes. Pudo haberse casado nuevamente, pero desde los ejercicios espirituales su vida queda orientada al estado religioso. Sin embargo, tiene una hija y por lo tanto la perfección ha de buscarla en su condición de madre, sacrificando y combinando sus propios gustos, intereses e inquietudes, con aquellos que convienen a la formación de la pequeña Refugio Teresa. Como madre de familia es severa, exigente y siempre vigilante. Evita que su hija tenga malas compañías; le prohíbe leer libros que atenten contra las buenas costumbres y que escuche ciertas conversaciones entre adultos.


Muy lejos de sobreprotegerla, sabe respetar su vocación y la educa para responder libremente a lo que Dios le tenga destinado, despertando en ella ideales de santidad y anhelos de colaborar en la salvación de las almas. Con gran visión del papel que la mujer desempeñará en la nueva sociedad industrializada, en 1904 la matricula en un internado de la ciudad de México para que termine sus estudios elementales. Al año pasará a Morelia a estudiar la normal, graduándose de maestra en 1907.


En su experiencia de madre y en el ejercicio del apostolado, María del Refugio siente que Nuestro Señor le confía la salvación de los niños y jóvenes y que debe procurarla con el buen ejemplo, con la palabra y con la oración. Llega a la convicción de que transformará al mundo promoviendo los valores cristianos, formando ciudadanos que cumplan con sus deberes y respeten los derechos de los demás, a la vez que tengan acceso a mejores condiciones de trabajo, sean solidarios con el prójimo y hagan buen uso de los bienes materiales. Conforme aumenta su grado de conciencia de Quién es a quien recibimos en la Comunión, se siente más indigna de recibirlo y profundamente apenada por que hay quienes comulgan sacrílegamente y quienes niegan la presencia real del Señor en el augusto sacramento. Por ello se dispone a responder incondicionalmente a lo que Dios le inspire.


En uno de sus viajes a la capital michoacana a visitar a su hija, entra a la catedral y al estar orando ante la imagen de la Virgen de Guadalupe, concibe el proyecto de fundar un instituto religioso para extender el amor al Santísimo Sacramento, reparar los pecados del mundo, y también como estrategia para dar mayor trascendencia a su actividad apostólica. Un Instituto que, sin dedicarse de manera exclusiva a una determinada clase social, atienda establecimientos educativos, centros de catequesis y bibliotecas donde se proclame el Evangelio e infunda y difunda el amor a Jesús Sacramentado desde la propia realidad y cultura de las gentes. Comunica la idea a un sacerdote conocido suyo, Vicente Zaragoza, y conjuntamente estudian la manera de llevarla a cabo.Con la intención de prepararse interiormente y ultimar los detalles de la fundación, María del Refugio ingresa, en enero de 1908, al pensionado de la Compañía de María en la ciudad de México. Le acompaña su hija, quien prestará sus servicios en el colegio de dichas religiosas, con el fin de adquirir experiencia para después colaborar como profesora seglar en la obra de su madre. Al poco tiempo se les une Guadalupe Hernández Barba, dirigida también del Padre Zaragoza.


El 25 de marzo de 1910 es la fecha de fundación del Apostolado de Jesús Eucarístico y el 16 de abril de ese año el Arzobispo de México, José Mora y del Río, bendice e inaugura el Colegio del Santísimo Sacramento. A partir de entonces toda la vida de María del Refugio girará en torno a la comunidad y la escuela, alimentando su espíritu con la Comunión cotidiana y la adoración al Santísimo, y desbordando su caridad en quienes la rodean, interesándose por el bienestar espiritual y moral de los educandos y sus familias, concediendo educación gratuita a quienes no la pueden pagar, dando calor de hogar a los huérfanos y abandonados, consolando a los afligidos, albergando a los perseguidos, dando de comer y de vestir a los pobres.


El fundamento de su proyecto educativo es que en el centro de todas las ciencias está Dios y que no hay auténtica vida cristiana sin la participación eucarística y la protección de María. En otras palabras, ir más allá de lo académico, haciendo del aprendizaje una experiencia mística que nos descubra y haga gozar y agradecer la presencia y la grandeza de Dios. En sus escuelas se impartirá una educación ordenada e integral, útil y que satisfaga los programas oficiales, empleando en todo los métodos más avanzados de la pedagogía, formando en los educandos hábitos de bien obrar y enseñándoles a gobernar las pasiones por medio de la voluntad, para que bien ordenadas y ayudadas de la gracia recibida en la comunión eucarística, los conduzcan al bien. Para formar el intelecto atenderán al desarrollo simultáneo de todas las facultades humanas y despertarán el gusto por el trabajo. Y para educar en la moral, buscarán el remedio para todo en la ley de Dios, en la oración y en los sacramentos, especialmente en la Sagrada Eucaristía. Así mismo, infundirán la urbanidad, el lenguaje castizo y pulcro, y los hábitos sociales de las personas cultas, que facilitan el acceso a una sociedad civilizada. Para descansar del trabajo intelectual: ejercicios gimnásticos, alimentación nutritiva, baños frecuentes, excursiones y paseos.


La vigilancia preventiva es otra de las características, haciendo ver a las religiosas que son responsables ante Dios de la pureza de los niños y que por lo mismo deberán evitarles las ocasiones de pecado.La fundación del Instituto coincide con la caída del gobierno de Porfirio Díaz. Un gobernante aferrado al poder y las condiciones de opresión y miseria en que vivía un sector mayoritario de la población, fueron el detonante de una revolución que dejaría cientos de miles de muertos y que acabaría con la economía productiva, agudizando la pobreza de las masas. A la par, la Iglesia sería cruelmente perseguida, sus ministros encarcelados y desterrados, sus bienes confiscados, sus establecimientos benéficos clausurados y todo lo largo del territorio nacional bañado con la sangre de los mártires.


El general Díaz fue obligado a renunciar, embarcándose el 31 de mayo de 1911 con destino a Europa. Francisco León de la Barra se hizo cargo del gobierno interino y el 6 de noviembre de ese año Francisco I. Madero iniciaba un período presidencial caracterizado por luchas agrarias y enfrentamientos entre líderes revolucionarios ávidos de poder. El 9 de febrero de 1913 hubo una sublevación militar que desencadenó diez días de intensos y sangrientos combates en la ciudad de México, terminando el martes 18, al desconocer el general Victoriano Huerta al Gobierno, mandando aprehender y fusilar al Presidente Madero y al Vicepresidente Pino Suárez. El saldo es de más de dos mil muertos y seis mil heridos. Durante esos días María del Refugio improvisa un puesto de socorros y ahí, ayudada de sus compañeras y dos médicos amigos, atiende a los heridos. Por los levantamientos y las guerras fratricidas escasean los alimentos. María del Refugio organiza colectas de víveres y ropa que luego reparte entre familias pobres, llegando a contarse, en 1915, cerca de cuatrocientas personas las que acuden diariamente a las puertas del colegio y a todas se les da de comer. Por todos estos servicios la Asociación Mexicana de la Cruz Blanca Neutral le concedería, años más tarde, una mención honorífica.El año 1917 inicia con la promulgación de una nueva Constitución (5 de febrero), que negaba personalidad jurídica a la Iglesia y a los sacerdotes sus derechos ciudadanos, desconocía las comunidades y los votos religiosos, proscribía la educación confesional, prohibía el culto público fuera de los templos y los bienes eclesiásticos pasaban a ser propiedad de la nación; aunque, si bien es cierto, el Presidente Carranza permite el regreso de los obispos desterrados, tolera el ejercicio del ministerio sacerdotal y que las congregaciones religiosas continúen atendiendo escuelas y hospitales.


El Colegio del Santísimo Sacramento se cambia a una villa en la Avenida Chapultepec 183. Estaba en condiciones deplorables y resultaba pequeña, por lo que de inmediato se emprenden algunas mejoras y ampliaciones. Las Hermanas habrían de pasar varios años entre albañiles, plomeros y carpinteros; cada semana con el apuro de cómo pagar la raya, habiendo días en que amanecían sin un centavo, confiando tan sólo en la Providencia. Al finalizar los albañiles el trabajo del día, María del Refugio reza con ellos el rosario, les dirige el ofrecimiento de flores a la Santísima Virgen y en cuaresma les hace sus ejercicios espirituales. A los amancebados los motiva para que se casen por la Iglesia, preparándolos antes para los sacramentos de la reconciliación y de la Eucaristía. Y para promoverlos humanamente, a los analfabetas los enseña a leer.María del Refugio tiene amistad con algunos obispos, entre ellos el de Tulancingo, José Juan de Jesús Herrera y Piña, quien desde 1914 se había interesado por la comunidad, visitándola y aconsejándola. Posiblemente es él quien sugiere soliciten al arzobispo Mora y del Río les nombre un director que las oriente y organice canónicamente. A finales de 1918 se presenta fray Alfredo Scotti, mercedario, con orden de constatar el estado que guarda la comunidad. Hasta entonces la vida de la comunidad se ha desarrollado familiarmente, normándose sólo por un reglamento muy sencillo que ordenaba los horarios y definía las responsabilidades para cada uno de los cargos y oficios. La jornada comenzaba a las cuatro y media y concluía a las nueve de la noche, habiendo tiempo para la santa misa, la adoración eucarística, la oración comunitaria, meditación, lectura espiritual, examen, enseñanza u otros trabajos, aseo de salones, alimentos y recreaciones. Hacían falta constituciones, directorio y ceremoniales.


María del Refugio redacta los borradores, en los que define su ideario de vida religiosa. Según ella, esta comunidad eucarística es una familia y como en todo hogar, hay un orden y un respeto que guardar, establecido en sus reglas y horarios, así como en el trato cordial y educado, indispensable para la convivencia filial y fraterna, que habrá de manifestarse en armonía entre los miembros y en alegría. Señala la bondad, la urbanidad, la paciencia, la humildad, como elementos que deben existir para que las relaciones en toda familia sean constructivas y fraternas. Pero sobre de éstos, el amor y el perdón. El Apostolado de Jesús Eucarístico tenía tres miembros el día de su fundación; en enero de 1919 eran quince y un año después veintisiete. Entre las señoritas que por ese tiempo ingresaron a la comunidad, se encontraba María (Refugio) Cancino, quien hasta entonces había llevado la vida ordinaria de una seglar. En agosto de 1920 resuelve ingresar al Instituto fundado por su madre y el 12 de octubre toma el hábito, recibiendo en religión el nombre de María Teresa.


El aumento de personal es motivo para que la comunidad inicie su expansión. La primera casa filial es la de Popotla, cuyo colegio fue inaugurado el 2 de febrero de 1919. Cinco meses más tarde se abre la segunda, en San Luis de la Paz, y en diciembre una en Real del Monte. Siguen otras en Jalapa, Sayula, San Luis Potosí, Monterrey, Saltillo, Toluca y Tacubaya. En algunas de estas fundaciones se vive en suma pobreza, careciendo incluso de alimentos. María del Refugio, sin embargo, está conforme con las precarias condiciones, recordando aquella máxima de Santa Teresa, de que “todos los principios son penosos” y con la convicción de que, una vez comenzado algo, debe continuarse, sin importar las dificultades que puedan presentarse, siempre y cuando sea voluntad de Dios y de los Superiores.En vista del número de casas y de miembros y de que ya todo está bien organizado, el Arzobispo Mora y del Río pone en manos del Padre Scotti la solicitud de aprobación diocesana del Apostolado de Jesús Eucarístico, junto con las cartas de recomendación de varios obispos, para que las lleve personalmente a Roma. La Sagrada Congregación de Religiosos encuentra todo bien preparado, por lo que concede, el 15 de junio de 1922, el permiso de erección canónica, cambiando el nombre de la comunidad al de Apostolado del Santísimo Sacramento.


Las Constituciones sufren algunas modificaciones, que si bien no cambian la esencia del Instituto, sí amplían su fisonomía espiritual. El fin seguiría siendo el mismo que las había congregado y para el cual fueron aprobadas y erigidas: la santificación de sus miembros por la práctica de los consejos evangélicos y la extensión del reinado de Jesús Eucarístico en todas las clases sociales, enseñando a través de la educación cristiana de la niñez y juventud, que Jesús Sacramentado es el centro de todas las ciencias. En los patronos hay añadiduras: junto a la advocación guadalupana incorporan la de la Virgen de la Merced, y entre los santos protectores, junto a San José, San Miguel Arcángel, San Pascual Baylón y Santa Teresa de Jesús, aparece San Ramón Nonato, el santo mercedario de la Eucaristía.La comunidad va tomando un matiz mercedario. En agradecimiento a la Virgen Redentora de cautivos, María del Refugio solicita la agregación a la Orden, misma que les es concedida el 11 de julio de 1925, siendo desde entonces conocidas como Religiosas Eucarísticas Mercedarias y desde 1948 como Hermanas Mercedarias del Santísimo Sacramento. Por esta devoción las Hermanas están llamadas a participar del dolor maternal de María, asociado al misterio redentor de Jesús, y a colaborar con actos heroicos de amor y caridad para rescatar al hombre de sus cautividades modernas y así salvar sus almas.Los ataques del Gobierno contra la Iglesia son cada vez más frecuentes.


El 30 de noviembre de 1924 toma posesión como Presidente de la República Plutarco Elías Calles, quien en febrero de 1925 promueve un cisma, con el fin de instituir una religión dependiente de la autoridad civil. Y en febrero de 1926, la prensa atribuye a Monseñor Mora y del Río unas declaraciones contra la Constitución de 1917, que sirven de pretexto para desencadenar la brutal persecución religiosa. Esa misma semana la mayoría de los colegios católicos son clausurados. Para su reapertura, el Gobierno reclama el cumplimiento de lo estipulado en la Constitución, que en su artículo tercero, dispone: “Las corporaciones religiosas, los ministros de cultos, las sociedades por acciones que, exclusiva o predominantemente realicen actividades educativas, y las asociaciones o sociedades ligadas con la propaganda de cualquier credo religioso, no intervendrán en forma alguna en planteles en que se imparta educación primaria, secundaria y normal y la destinada a obreros o a campesinos”. Los obispos conminan a los directores de los colegios católicos a que firmen las declaraciones en las que se comprometen a observar cabalmente el artículo tercero constitucional. Todos firman, excepto el Padre Juan Carranza y las Hermanas del Apostolado del Santísimo Sacramento. María del Refugio no podía, en conciencia, sujetarse a una ley que atentaba contra Dios y contra la libertad del hombre. Consulta a Monseñor Crespi, Secretario de la Delegación Apostólica, quien opina que la Santa Sede preferiría que dejaran los colegios antes que transigir con lo estipulado por las autoridades civiles. Pero el Vicario General del Arzobispado, Maximino Ruiz y Flores, le dice que no debe rebelarse a las disposiciones superiores; esto disipa las dudas y con repugnancia cede, haciendo que una seglar firme por ella. Las clases reinician el martes 27 de abril, pero el crucifijo y las imágenes religiosas permanecen en las paredes de las aulas del Colegio del Santísimo Sacramento, porque María del Refugio considera que los símbolos de la fe son parte esencial del medio ambiente que debe imperar en sus establecimientos.
El jueves 27 de mayo se presentan a las puertas del Colegio del Santísimo Sacramento dos agentes de la Secretaría de Gobernación con orden de cateo. Encuentran a las Hermanas portando sus hábitos. Pistola en mano recorren la casa, revisando hasta por debajo de las camas, pues -según dicen- tienen orden de disparar “sobre cualquier cura que encuentren”. Para evitar una profanación, María del Refugio toma el Santísimo Sacramento y llevándolo bajo el manteo los acompaña por toda la casa, al tiempo que les habla, con energía y valor, dándoles respuestas, como: “No temo que ustedes me cierren, como dicen, los oratorios, porque el oratorio que llevo en el corazón, ese sí que no lo podrán cerrar”. Escenas similares se repetirían continuamente en los años venideros.El 2 de julio de 1926 el Presidente de la República promulga una ley que reglamenta el ejercicio de los cultos, sujetando el ministerio espiritual al poder civil. La aplicación de la llamada “Ley Calles”, comprende la expulsión de sacerdotes extranjeros, prohíbe la prensa católica, censura la correspondencia, penaliza incluso la práctica religiosa en privado, y dispone el cierre de los colegios confesionales, los seminarios diocesanos y las instituciones de beneficencia asistidas por religiosas.
El Episcopado responde con una carta colectiva en la que comunica la decisión de suspender el culto público en todos los templos del país, a partir del 30 de ese mes. La clausura de los Colegios Eucarísticos es inevitable. El 15 de julio es el último día de clases en Avenida Chapultepec, aunque algunas Hermanas continuarán instruyendo subrepticiamente, reuniendo grupos de niñas en casas de familias. Hacía tiempo que viendo cómo la cuestión religiosa en México se complicaba, María del Refugio había pensado abrir casas en España e Italia como medio para conservar la vocación de sus religiosas y la vida del Instituto. El primer paso fue una fundación en Placetas, Cuba, en septiembre de 1925, que serviría de puente a las Hermanas destinadas a las fundaciones ultramarinas. Luego tramita una fundación en El Salvador y el traslado del noviciado a Oklahoma, en los Estados Unidos. En La Habana abre otro Colegio Eucarístico (6 septiembre 1926) y de España le proponen abrir una casa en las Provincias Vascongadas, fundación que lleva a cabo luego de que en comunidad hiciera los Siete Domingos a Señor San José encomendándole el asunto.
La superiora general y las consejeras permanecerían en México, saliendo temporalmente de su convento para refugiarse en los sótanos de una casa vecina, desde donde seguirían gobernando el Instituto. En los primeros meses de esta persecución religiosa, María del Refugio había recibido una carta del Maestro General de la Orden de la Merced en la que la alentaba y compadecía por la crítica situación por la que pasaba la Iglesia en México. Por el mismo conducto escribía fray Luis Márquez Eyzaguirre, ofreciendo sus servicios para conseguir una fundación en Chile, su tierra natal, la que María del Refugio no dudó en aceptar. El contacto con algunos mexicanos en Lovaina y Estados Unidos, motivaron al Padre Márquez a hacer un viaje a México (1928) para ver por sí mismo la situación por la que pasaban los católicos. Se embarcó en el “Alfonso XIII”, llegando a Veracruz el 11 de marzo. En el vapor trabó amistad con un joven norteamericano; viendo providencial su compañía para despistar a los agentes, lo invitó a proseguir el trayecto juntos hacia la capital mexicana.
El encuentro con María del Refugio lo calificó Márquez como la impresión más grande de su vida. Se hospedó en la Avenida Chapultepec, permaneciendo en la ciudad de México durante un mes, ocasión que aprovechó para proponer otras fundaciones: Cartagena en Colombia y Caltanissetta en Italia, que se realizarían, pero con no pocos contratiempos. A raíz de la persecución religiosa la Congregación había iniciado su expansión en el extranjero. Hacia 1929 funcionaban con dificultades y penurias el noviciado de Oklahoma, dos colegios en Cuba, uno en la República de El Salvador, otro en Chile, otro en España, otro en Colombia y uno más en Italia. En México quedaban el gobierno general y los colegios de la Colonia Roma, Coyoacán y San Luis Potosí. La casa de Chapultepec estaba denunciada como escuela católica desde 1924, constando en el acta la existencia de una capilla. Desde 1926 había dejado de funcionar el colegio y a la fecha la habitaban únicamente el Consejo General y algunas niñas. Otras dependencias estaban ocupadas por familias o permanecían desocupadas. Pero la clausura del establecimiento y el alquiler de los departamentos, no lograron terminar con las frecuentes inspecciones de los agentes del Gobierno y el resultado de los cateos confirmaba la existencia de una comunidad religiosa.
Previendo lo peor, María del Refugio hace demoler la capilla, para que, en caso de expropiación, no fuera profanada. Cuando ya la causa estaba perdida, alquila una casa en Coyoacán, que pasan a ocupar el 8 de septiembre de 1930, al ser despojadas del único inmueble que poseían y que habían adquirido con tantos afanes y sacrificios. Jamás se quejaría ni hablaría mal de quienes se apropiaron del patrimonio de la Congregación. Al comunicar la noticia a las Hermanas, lo hace diciendo: “Ultimamente se ha servido el Señor permitir que fuésemos despojadas de nuestra Casa Madre, que tantos sacrificios nos había costado y en la que teníamos colocadas tantas esperanzas. ¡Bendito sea el Señor en sus dones y hágase su divina voluntad!”.La política del Gobierno estaba enfocada a manipular la instrucción para adoctrinar a las nuevas generaciones. El Presidente Abelardo Rodríguez reforma la Constitución para obligar la educación socialista y sectaria en todo el país, lo que su sucesor, el General Lázaro Cárdenas, se empeñaría en hacer cumplir. Los maestros de las escuelas públicas y privadas serían obligados a apoyar los fines de la educación socialista y a implantarla en las escuelas, así como propagar los postulados y principios del socialismo promovido por el Gobierno nacional, entre los que destacaba el combatir el catolicismo.María del Refugio había llegado a Coyoacán animada, serena y alegre, pero a sabiendas de que tendría que cambiar de residencia en varias ocasiones por el temor de los propietarios de perder sus bienes por alquilar a una comunidad religiosa. Estaba profundamente dolida, sí, por el ateísmo y contenido inmoral de los programas obligatorios de enseñanza. Así mismo le repugnaba la actitud condescendiente de los educadores católicos frente a las exigencias del Gobierno. Por ello quiere desagraviar a Dios, y lo hace dando familia y educación a siete niñas huérfanas: una por cada uno de los dolores de la Santísima Virgen. Esto es lo que llamarían obra de infancia. Escribe a las casas comunicando su idea. De Cuba mandan dos niñas, de España otras dos y de México una. La vida no le alcanzaría para completar las siete, pero para estas cinco fue una verdadera madre.La última casa que ocupa es la de Martí 256, en la Colonia Escandón. Al entrar por primera vez (septiembre de 1936) presiente que su muerte está próxima y manda poner un pasamanos en la escalera del ingreso, para que los empleados de la funeraria tengan donde apoyarse al sacar el ataúd. A las pocas semanas, al estar rezando fervorosamente la novena de la Virgen de Guadalupe, una corriente de aire en el cuarto que se adaptó como capilla le provoca una pulmonía. Al inicio del año 1937 se encuentra muy agotada por una tifoidea que venía padeciendo hacía varios meses, con fiebre y malestar continuo.
A mediados de febrero le diagnostican bronconeumonía y poco después nefritis, que le ocasiona la hinchazón de todo el cuerpo. Su condición empeora por insuficiencia del riñón, temperatura baja y el agua invade los tejidos, saliendo por las piernas más de treinta litros. Se halla en un estado de debilidad absoluta, sufriendo muchísimo, sin movimientos y con dolores indecibles al cambiarla de postura, pero soporta todo con suma paciencia y resignación.Escribe a todas las religiosas participándoles su gravedad, encomendándose a sus oraciones y haciéndoles algunas exhortaciones. A las Hermanas que la acompañan les pide unión y caridad fraterna, les recomienda que cumplan con su guardia ante el Santísimo, que no dejen de rezar por los difuntos y que no la dejen en el purgatorio diciendo: “¡era tan buena!”. Dispone todo lo que se debe de hacer y prepara las sábanas para su mortaja. El 23 de abril amanece muy grave. Le hacen una transfusión de sangre que le ocasiona fuerte reacción. La acompañan la Madre Guadalupe y el Padre Zaragoza, a quien pide la absolución.


Cuando el Padre ve que la vida de María del Refugio está llegando a su fin, le toma la mano derecha y le dice: “Bendice a tus hijas”. Da una última mirada, pronuncia las palabras: “arriba, arriba...” y ya en toda paz muere. Faltaban veinte minutos para la una de la madrugada del 24 de abril de 1937.


El recuerdo de una mujer ejemplarmente virtuosa, enamorada del Santísimo Sacramento y ansiosa de compartir ese amor por todas partes y con todo el mundo, conforta y llena de esperanza a sus hijas religiosas, amistades y conocidos. Muy pronto comenzarían a experimentar los frutos de su intercesión en el cielo.Los años que siguieron, el Instituto de las Hermanas Mercedarias del Santísimo Sacramento alcanzaría un desarrollo notable. En diez años se duplicaron las casas y el personal; y el 22 de julio de 1948 Pío XII concedía el decreto laudatorio.La fama de santidad de la fundadora continuaría creciendo, contándose cada vez más las personas que testimoniaban un cambio en su manera de vivir luego de conocer la vida de María del Refugio Aguilar y Torres; como también las que informaban de gracias y favores alcanzados por su intercesión. Lejos de ser olvidada, María del Refugio se perfila como modelo de vida eucarística para el nuevo milenio.

lunes, 26 de noviembre de 2007

MARÍA DEL REFUGIO AGUILAR: VISITA LOS SALONES




Los alumnos de los sextos y novenos grados del plantel, han visitado los salones de la institución dando a conocer la biografía de la Sierva de Dios Madre María del Refugio Aguilar y Torres

domingo, 25 de noviembre de 2007

MARÍA DEL REFUGIO EN EL MUNDO

DIVIERTETE CREANDO


DALE CLIP AL SIGUIENTE ENLACE Y DIVIERTETE CREANDO TU PROPIA SOPA DE LETRAS:
DALE CLIP AL SIGUIENTE ENLACE Y DIVIERTETE JUGANDO:

jueves, 22 de noviembre de 2007

UN AÑO MAS DE VIDA



Acción de gracias por un año más de vida que el Amado me concede

miércoles, 21 de noviembre de 2007

CONCURSOS EN EL AÑO JUBILAR



Las Hermanas de la Provincia María del Refugio, dando respuesta a los trabajos preparatorios para la Celebración del primer Centenario del Instituto han convocado a los Concursos de GRAFFITI y de Reflexión Teológica o Bíblica de pensamientos y Consejos de María del Refugio Aguilar y Torres.


La fecha de inscripción es a partir del día 15 de Noviembre hasta el 30 del mismo mes.
Cualquier información puede ser pedida o consultada a través del siguiente email: elevede1950@hotmail.com

Hermanas Mercedarias del Santísimo Sacramento


Fueron fundadas en la ciudad de México, el 25 de Marzo de 1910.Habiendo solicitado la madre María del Refugio a la curia diocesana un religioso como director y guía del Instituto, le fue indicado el padre Alfredo Scotti, entonces provincial de México.

El padre Scotti tomó gran interés por el bien de la comunidad, dedicándose a la revisión de las Constituciones, de acuerdo con la madre María del Refugio y con la ayuda de la madre Consuelo Olivares.

Fueron agregadas espiritualmente a la Orden de la Mercedel 11 de julio de 1925.Obtuvieron la aprobación pontificia el 22 de julio de 1948.

La finalidad del Instituto está expresada con estos términos en las constituciones aprobadas en 1989: “Trabajar con todo ahínco por extender el reinado de Jesús Eucaristía y el amor filial a Nuestra Madre Santísima de la Merced”.Este apostolado se expresa mediante la educación de la infancia y de la juventud, su formación en el culto y piedad eucarísticos.

La Congregación tiene escuela y colegios, y dedica especial cuidado a la preparación de los niños para la primera comunión.

Actualmente se encuentran en México, Cuba, Colombia, Chile, Estados Unidos, El Salvador, Italia, España, Costa Rica, Mozambique,Venezuela, Guatemala.

ACTO DE BIENVENIDA


REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
MINISTERIO DE EDUCACIÓN Y DEPORTE
U.E. ARQ. MONS. “RAFAEL ARIAS BLANCO”
COMISIÓN DE PASTORAL Y DIFUSIÓN CULTURAL



BIENVENIDA A NUESTRA ESCUELA:
A LA MADRE GENERAL: MADRE MARÍA
DE LA LUZ ACOSTA Y MADRE GRACIELA


PROGRAMACIÓN




· Formación del Alumnado en la Cancha
· Himno Escolar
· Palabras de apertura a cargo de la Directora Académica Lcda. Milagros Barrera
· Canto: Venezuela
· La Historia de la Escuela: 6to “B”
· Desfile Cultural con las Candidatas de la Vigésima Feria Escolar
· Canto: El Papagayo
· Gaitas
· Entrega de presentes
· Saludo de la Madre María de la Luz


“GLORIA A TI CASTA SEÑORA”

lunes, 19 de noviembre de 2007

BIENVENIDAS A LA TIERRA DEL SOL AMADA

Bienvenidas sean Queridas Madres a esta tierra tan especial....y en son del ritmo del Zulia le decimos con esta Gaita a usted Madre María de la Luz juntamente con la Madre Graciela lo siguiente:

Calurosa Bienvenida
le damos a ustedes hermanas
que vienen de tierras lejanas
a visitar nuestra escuela
Hoy Mexico y Venezuela
se unen con bellos lazos
reciban con abrazo
nuestra amistad verdadera

ayyy si tienen mucho calor
si les ha gustado el clima
tomenlo como medida
de nuestro candente amor.....

ayyy que divina profesión
vocación tan necesaria
ser Hermana Mercedaria
llevando liberación....

miércoles, 31 de octubre de 2007

¿QUIENES SON LAS HERMANAS MERCEDARIAS DEL SANTISIMO SACRAMENTO?


La Congregación de las Hermanas Mercedarias del Santísimo Sacramento es un Instituto de Derecho Pontificio. Sus orígenes se remontan a las inquietudes y profunda vivencia Eucarística de María del Refugio Aguilar y Torres quien inspirada por Dios y ayudada por el Presbítero Vicente María Zaragoza, fundan el apostolado de Jesús Eucarístico con el fin de extender el reinado de Jesús Sacramentado en todas las clases sociales, principalmente en la niñez y juventud.

La Sierva de Dios, María del Refugio Aguilar y Torres fundó el Instituto de Hermanas Mercedarias del Santísimo Sacramento en la Ciudad de México.

Llena de amor a Jesús Sacramentado y a María Santísima, transmite ese espíritu a sus hijas para extender el Reinado de Jesús Eucaristía.

Testimonio de mujeres libres y liberadoras, impulsadas por el mismo fuego que encendió el corazón de María del Refugio, nuestra Fundadora, quien concibió un proyecto educativo para evangelizar a la familia y la sociedad, orientado a enseñar que en el centro de todas las ciencias está Dios y que no hay auténtica vida cristiana sin la participación eucarística y la protección de María.

Con esta meta, la formación moral y la instrucción científica han de ser sólidas y profundas, humildes y sencillas, desarrollando en la voluntad hábitos de bien obrar, fortaleciendo la inteligencia y robusteciendo el cuerpo.

Valiéndose de los Colegios, socorrió a los pobres, huérfanos y desposeídos, con amor y gran actividad sin buscar prestigio o reconocimiento. Sus obras de misericordia pasan generalmente desapercibidas. (Consuela a las familias que sufren, da albergue a los perseguidos, alimenta y viste a los necesitados). Con valentía y entereza defendió el derecho de la libertad religiosa y siempre tuvo adhesión a los prelados. Los Colegios Eucarísticos promueven entre sus educandos el conocimiento de la realidad social y el rescate de los valores culturales de cada nación.

El 24 de abril de 1937, tras una larga enfermedad que sufrió con ejemplar paciencia y resignación, la Madre Fundadora María del Refugio Aguilar y Torres pasó a mejor vida.

El éxito alcanzado en la educación eucarística- mercedaria se manifiesta en cristianos comprometidos en la búsqueda del bien común útiles a la sociedad.

Nuestra Fundadora encarna para nosotras el celo apostólico por la salvación del mundo haciendo suyas las palabras de Cristo: He venido a traer fuego en la tierra ¡y cuánto desearía que ya estuviera ardiendo' Por lo tanto, todo nuestro apostolado tiene como fin liberar al hombre de sus esclavitudes actuales.

CAMPOS DE APOSTOLADO

- Colegios
- Casas hogar
- Misiones permanentes y temporales
- Casas de Espiritualidad
- Atención a Seminario
- Guarderías
- Evangelización y Pastoral Penitenciaria
- Movimiento JEM

ESPÍRITU: Eucarístico Mercedario.
MEDIOS: Oración-Enseñanza-Sacrificio.

Evangelizamos con María a la luz de la Eucaristía en: México, Colombia, Chile, Venezuela, España, El Salvador, Cuba, Italia, Costa Rica, USA y Guatemala.





MISIONES Y MERCED